Los fosfatos son compuestos orgánicos e inorgánicos del elemento químico fósforo (P), que existen en muchas formas. En sentido estricto, el término se refiere a las sales del ácido fosfórico (H₃PO₄). En la fisiología vegetal, los fosfatos inorgánicos desempeñan un papel importante junto a los nutrientes en diversos procesos esenciales como la regulación de la ósmosis, el transporte de iones, la fotosíntesis y la protección contra enfermedades (al igual que los cloruros, nitratos y sulfatos). Existen los siguientes compuestos con las funciones enumeradas:
- Fosfato de aluminio (AlPO₄) - fertilizante para la salud de las plantas y la estructura del suelo.
- Fosfato cálcico (Ca₃(PO₄)₂) - crecimiento celular; desarrollo de las raíces; resistencia a las enfermedades.
- Fosfato de hierro(III) (FePO₄) - transporte de electrones fotosíntesis; producción de energía; transporte de oxígeno
- Fosfato de potasio (K₃PO₄) - regulación del equilibrio energético; transporte de nutrientes; crecimiento; resistencia al estrés
- Fosfato de magnesio (Mg₃(PO₄)₂) - producción de clorofila; mejora del rendimiento de la fotosíntesis
- Fosfato sódico (Na₃PO₄) - presión osmótica para el equilibrio hídrico; absorción de nutrientes; vitalidad.
Otro fosfato inorgánico es el fosfato de plata (Ag₃PO₄). Se utiliza en el tratamiento del agua para eliminar microorganismos no deseados. La mayoría de estos fosfatos también pueden encontrarse en pequeñas cantidades en el suelo y el agua. A partir de cierto nivel, pueden provocar problemas medioambientales como la eutrofización (griego antiguo eutroph = bien nutrido, aporte excesivo de nutrientes, especialmente compuestos de nitrógeno y fósforo).
