Término coloquial para designar platos, especias y frutas que requieren una selección especialmente cuidadosa del vino de maridaje o que no combinan bien con el vino debido a desarmonías de sabor. Se trata sobre todo de platos o ingredientes con un alto contenido ácido, o que tienen un sabor muy fuerte, graso y/o aceitoso. En estos casos, un vino, por bueno que sea, puede no dar la talla o incluso resultar decepcionante.
Por ejemplo, piña, alcachofas, achicoria, guindillas, curry, platos con huevo, helados, vinagre, sorbetes de frutas, arenque, grosellas negras, mayonesa, sardinas en aceite, naranjas, arándanos, platos salados, ensaladas ácidas, chocolate, espinacas y cítricos. Por el contrario, hay platos que pueden combinar muy bien con un vino adecuado. Véase en amantes del vino y vino con comida, así como plagas y enfermedades en el viñedo en enemigos de la vid.
Por mis muchos años de trabajo como redactor con un enfoque vinícola, siempre me gusta informarme en la enciclopedia del vino cuando tengo preguntas especiales. La lectura espontánea y el seguimiento de los enlaces suelen conducir a descubrimientos apasionantes en el amplio mundo del vino.
Dr. Christa Hanten
Fachjournalistin, Lektorin und Verkosterin, Wien