Una de las seis sensaciones gustativas oficialmente reconocidas (además de amargo, graso, salado, ácido, umami) que se percibe en la punta de la lengua. El sabor dulce de un vino se percibe principalmente en función del azúcar residual; se trata de la cantidad de azúcar sin fermentar en g/l. La percepción subjetiva del dulzor depende de varios factores. Entre otros, de la relación cuantitativa de los distintos ingredientes entre sí. Por lo tanto, la impresión gustativa no tiene por qué ser idéntica a los valores analíticos realmente determinados. El contenido de ácido carbónico de los vinos puede tener cierta influencia sensorial en la percepción del dulzor.
Por mis muchos años de trabajo como redactor con un enfoque vinícola, siempre me gusta informarme en la enciclopedia del vino cuando tengo preguntas especiales. La lectura espontánea y el seguimiento de los enlaces suelen conducir a descubrimientos apasionantes en el amplio mundo del vino.
Dr. Christa Hanten
Fachjournalistin, Lektorin und Verkosterin, Wien