Término colectivo para todos los productos (mayólica, porcelana, loza, gres) que se fabrican con diferentes tipos de arcilla mediante cocción. Las diferencias entre los distintos productos se deben a la diferente mezcla de materias primas (arcilla, cuarzo, feldespato, calcita, etc.) y, sobre todo, a la temperatura de cocción. La loza se cuece a menos y el gres a más de 1.200 °C; por lo tanto, la loza debe esmaltarse para garantizar una densidad suficiente. Las vasijas de este material son las más antiguas que se utilizaban para la producción y el almacenamiento de vino. Ejemplos de ello son las ánforas ya utilizadas en la antigüedad o los conocidos kvevri georgianos del proceso de Kakheti. Hoy en día, los recipientes de cerámica se utilizan cada vez más para la fermentación, el envejecimiento y el almacenamiento. Las ventajas son (al igual que con el vidrio) la completa neutralidad, es decir, no hay reacción con el mosto o el vino. Una desventaja con respecto a los contenedores de acero inoxidable o de madera es la fragilidad relativamente alta (grietas). Véase también una lista completa en el apartado de recipientes para vino.
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Dr. Edgar Müller
Dozent, Önologe und Weinbauberater, Bad Kreuznach