Este metal alcalino blando, de color azulado y plateado, es el séptimo elemento más abundante (K) en la corteza terrestre, con una cuota de alrededor del 2,5%. El nombre deriva del árabe "al kalja", que significa "potasa" (potasio), antigua denominación del carbonato de potasio obtenido de las cenizas de madera. El elemento reactivo sólo se encuentra en la naturaleza en forma ligada. Está presente en muchos minerales como la mica, el feldespato, la kainita, la sal de potasio, la polihalita y la arcilla. Los experimentos con el aumento de la fertilización potásica han demostrado que las vides reaccionan a ello con una mayor producción de ácido málico. Así, el potasio influye en la acidez del vino. Los vinos ricos en potasio tienen una "acidez amortiguada o integrada" que se percibe como equilibrada. En comparación con otros minerales, el potasio está contenido en grandes cantidades en el mosto (hasta 1,5 g/l) o en el vino.
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Thomas Götz
Weinberater, Weinblogger und Journalist; Schwendi