Holanda (el corazón de los actuales Países Bajos) tuvo gran influencia en el comercio de licores y vinos a finales de la Edad Media. Desde finales del siglo XVI, Holanda se convirtió en la primera potencia marítima, muy por delante de Inglaterra, Francia, Portugal y España. Hacia 1650, Holanda poseía la mayor flota mercante del mundo, con unos 10.000 barcos. Las bebidas alcohólicas se compraban en toda Europa y se transportaban en barcos a las colonias de Norteamérica, las Indias Holandesas (Indonesia), Nueva Zelanda y Tasmania. Asimismo, los holandeses eran los principales proveedores de los países europeos. El puerto de Rotterdam se convirtió en el principal centro de transbordo de vino. Los holandeses eran grandes maestros de la destilación y producían enormes cantidades de genever (vino de grano) y brandewijn (aguardiente), que se utilizaba solo o como añadido al vino y al agua potable. El tiempo de conservación resultante era un requisito indispensable para los largos viajes por mar.
![]()
En el pasado, se necesitaba una gran cantidad de enciclopedias y literatura especializada para estar al día en la vida profesional de los vinófilos. Hoy en día, la enciclopedia del vino de wein.plus es uno de mis mejores ayudantes, y puede llamarse, con razón, la "biblia del conocimiento del vino".
Prof. Dr. Walter Kutscher
Lehrgangsleiter Sommelierausbildung WIFI-Wien